Vistas de página en total

viernes, 1 de abril de 2011

Genética, desastres nucleares.....(y nuestras fantasías)

El 26 de abril de 1986, se produjo en Chernóbil, Ucrania lo que es considerado el accidente nuclear más grave y uno de los peores desastres ambientales de la historia. Por ejemplo, después del evento  un área de 4 kilómetros cuadrados de pinos en las cercanías del reactor adquirieron un color marrón dorado y murieron, adquiriendo el nombre de "Bosque Rojo". El ministro de Sanidad ucraniano afirmó en 2006 que más de 2.400.000 ucranianos, incluyendo 428.000 niños, sufren problemas de salud causados por la catástrofe.Tal como señala el informe de 2006 de la ONU, los afectados por el accidente también sufren efectos psicológicos negativos causados por éste y los expertos consideran que es improbable que los casos de cáncer debidos al accidente puedan ser detectados en las estadísticas nacionales de cáncer.  Con el accidente de la planta nuclear de Fukushima, los miedos aparecen de nuevo. Se habla de un apocalipsis nuclear, de “kamikazes” japoneses que exponen su vida en su intento por detener la fuga del material nuclear, y se cuestiona el futuro de la energía atómica en muchas partes del mundo. La información que circula nos confunde más. Ya no sabemos la realidad  de lo que pasa en Japón y se nos olvida que la energía atómica es de las menos contaminantes que existen, y cuando hablamos de riesgos, muertes o malformaciones genéticas asociadas a los accidentes nucleares, no tenemos en cuenta que los fallecimientos producidos por accidentes viales, o por el alcohol, por ejemplo, quizás superan  la cantidad de gente que se enferma, muere o deteriora su calidad de vida que por accidentes nucleares.  Y nadie dice nada a este respecto. Pero cuando sucede algo como lo que vivimos ahora tras el tsunami de Japón, podemos perder la objetividad y adelantar juicios.  Hace poco circulaba en la red un correo de tipo "hoax" , a mi parecer ridículo,  que recomendaba no salir a la lluvia, por los efectos de la radioactividad de Fukushima, que estaría llegando a México. Hace poco, a propósito de la situación de los japoneses, leía que los bosques ucranianos estan recobrando su flora y fauna silvestre. Por cierto, hace poco pasamos por la Planta Nuclear Laguna Verde, en el hermoso estado de Veracruz. Hay anuncios en la carretera que dicen que esta abierta al público general que quiera visitarla.

No hay comentarios:

Publicar un comentario